Bienvenido seas, 2017.

Muy buenas, primero… ¡¡¡Feliz año!!!! El 2017 promete.

Hemos tenido un pequeño parón del Blog en Navidades, necesitaba desconectar y recargar pilas, para empezar el nuevo año con energía renovada.

He disfrutado de mi tierra con familia y amigos, ellos hacen que cada día aquí sea único.

Cada 31 de diciembre me gusta hacer balance del año, no se si a vosotros también.

El mío fue muy positivo, ha sido un año importante en lo personal, en el mes de Junio finalicé mis estudios en el Colegio Cardenal Spínola, donde he crecido y madurado durante años, guardo un especial recuerdo de los profesores, las clases, los recreos y por supuesto mis compañeras, que pasaron a ser mis amigas.

El verano nunca me defrauda, es mi estación favorita. Y llegó octubre, era hora de salir de Villanueva y coger un vuelo dirección a Edimburgo.

Estaba seguro de que la decisión que había tomado junto a mis padres era la mejor, pero quieras o no, la incertidumbre te invade.

Realmente no era consciente del gran cambio y enriquecimiento personal que me supondría irme a vivir fuera de España, los tres meses estuve muy motivado con mi evolución con el inglés, pero con muchas ganas de estar con los míos.

Los últimos días del año los he pasado en casa; pero he sacado tiempo para culminar dos proyectos que tenía en mente, muy pronto podréis ver el resultado final.

¡Estoy deseando que veáis todo... todo!

Ayer os adelantaba en Instagram, que por la tarde tuve el placer de conocer al diseñador Roberto Diz. Para mi gusto es el mejor, ya que presenta una mujer diferente y distinguida, los diseños tienen un patronaje exquisito.

Una novia y una invitada que rompen el molde. 

Las hermanas Domecq, Inés y Mercedes, impresionantes como invitadas. 

En las redes sociales, me apoyó desde el primer momento, y me anima dando un simple like a mi trabajo.

No tenía el placer de conocerle personalmente, y el encuentro surgió como no, en un lugar relacionado con la moda, en la céntrica tienda de telas, Julián López.

Necesitaba comprar telas y pasé allí toda la tarde. Él entro para mirar telas, iba de un lado a otro de manera fugaz, pero fijándose en cada detalle de los tejidos.

Mi madre me acompañaba y sin dar crédito, le dije quien estaba a unos pocos metros; ella sin pensarlo dos veces, se dirigió hacia él y tuvimos la oportunidad de charlar.

En todo momento, fue muy natural y sencillo, todo lo habló él, porque yo no podía hacerlo.

GRACIAS por animarme a cumplir mis sueños… no olvidaré la tarde de ayer.

Después del subidón de ayer, mi motivación e ilusión para el 2017 no se pueden superar, ojalá sea un año repleto de momentos tan bonitos.

Como ya sabréis, hoy comienza en el Hotel Alfonso XIII, We love flamenco, la pasarela de tendencias de moda flamenca. 

Me encantará acompañar a la diseñadora Rocío Olmedo desde un lugar privilegiado, en el backstage, viviendo desde dentro todo lo que se cuece antes de un desfile, ya os contaré mi experiencia.

Rocío te mando toda la suerte del mundo, aunque no la necesites.

Muchas gracias por empezar el 2017 acompañándome en el Blog,

Besos.